El presidente de Rusia, Vladimir Putin, manifestó este viernes su profunda preocupación por el recrudecimiento de la violencia en Siria, e hizo un llamado a todas las partes involucradas a retomar el camino del diálogo y la negociación para evitar una mayor desestabilización regional.
Escalada en Siria bajo la mirada internacional
En medio de nuevos enfrentamientos armados y bombardeos en distintas zonas del país, el mandatario ruso subrayó que la situación en Siria se encuentra en un punto crítico, y advirtió sobre el riesgo de que el conflicto se expanda si no se reactiva el proceso político.
Durante una reunión oficial, Putin señaló:
“La situación sigue siendo extremadamente tensa. Nos preocupa la seguridad de la población civil y el riesgo de que se rompa por completo el frágil equilibrio alcanzado en los últimos años”.
Rusia insiste en la vía diplomática
El Kremlin, uno de los principales aliados del gobierno sirio de Bashar al Assad, ratificó su postura a favor de una solución política y negociada al conflicto, en línea con el proceso de Astaná y los acuerdos del Consejo de Seguridad de la ONU.
Putin remarcó que es necesario evitar provocaciones y que todas las partes —incluyendo actores regionales e internacionales— deben actuar con responsabilidad. También instó a fortalecer los canales de diálogo para reducir la tensión y prevenir una nueva crisis humanitaria.
Un conflicto sin resolución a la vista
Siria arrastra más de 13 años de guerra que han dejado cientos de miles de muertos y millones de desplazados. Aunque en los últimos años se había alcanzado una relativa calma en algunos frentes, los recientes estallidos de violencia reavivan el temor a una nueva escalada.
Conclusión
La declaración de Putin pone en evidencia la preocupación del Kremlin por el deterioro del escenario sirio, y refuerza la necesidad de reimpulsar el diálogo político en una región que sigue siendo foco de tensiones geopolíticas globales.
