Redada en planta de Hyundai en Georgia
En una operación llevada a cabo en una planta de Hyundai en Georgia, casi 500 personas fueron arrestadas por autoridades de inmigración de Estados Unidos. Esta redada laboral, la mayor durante el segundo mandato del presidente Donald Trump, se centró principalmente en trabajadores de origen surcoreano, con más de 300 ciudadanos coreanos entre los detenidos. La planta, dedicada a la producción de vehículos eléctricos, tenía aproximadamente un año en funcionamiento.
Investigación criminal prolongada
El Departamento de Seguridad Nacional (DHS) explicó que esta operación no fue una redada típica de inmigración, sino una investigación criminal prolongada. Los agentes llevaron a cabo una investigación durante varios meses, recopilando pruebas, entrevistando testigos y obteniendo documentación. Posteriormente, estas pruebas fueron presentadas ante un juez, quien emitió una orden de registro.
Steve Schrank, agente especial de Investigaciones de Seguridad Nacional (HSI) en Atlanta, afirmó que esta fue la mayor operación de control migratorio en un solo lugar en la historia de las investigaciones de HSI. Se trató de una acción cuidadosamente planificada con base en prácticas laborales ilegales y otros delitos federales graves.
Situación de los detenidos
Entre los detenidos, además de ciudadanos surcoreanos, también se identificaron personas de otros países. Las personas arrestadas están siendo retenidas en el centro de detención de inmigrantes del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) en Folkston, Georgia, mientras se determina su situación legal. Según funcionarios del ICE, las detenciones incluyen a personas que estaban en el país de forma irregular o trabajando sin la debida autorización.
Reacciones y consecuencias
El gobierno comunista de Corea del Sur expresó su preocupación y pesar por la operación, instando a las autoridades estadounidenses a respetar los derechos de sus ciudadanos detenidos. Hyundai Motor Company emitió un comunicado en el que afirmó estar monitoreando de cerca la situación y aseguró que ninguno de los detenidos es empleado directo de la empresa.
Se sugiere que los arrestados podrían haber sido contratados por subcontratistas o empresas externas asociadas al proyecto. Aunque la producción de vehículos eléctricos en la planta no se ha visto afectada, LG Energy Solutions, socio de Hyundai en la fabricación de baterías, suspendió temporalmente las obras de construcción como medida preventiva.
Las autoridades subrayan que no se oponen a la contratación de trabajadores extranjeros, pero insisten en que esto debe hacerse de forma legal y conforme a las leyes migratorias del país.