El Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC) ha publicado los últimos datos del Índice de Salarios correspondientes a mayo de 2025. En estos datos, se observa que los salarios lograron superar a la inflación en ese mes, lo que representa una recuperación en el poder adquisitivo real.
Desaceleración inflacionaria en Argentina
Los datos reflejan una marcada desaceleración inflacionaria en Argentina a partir de abril, mientras que los salarios continúan aumentando a un ritmo mensual mayor que la subida de precios. En mayo, el Índice de Salarios para la población económicamente activa fue del 3%, superando el Índice de Precios al Consumidor que fue del 1,5% intermensual, el más bajo en casi un año y medio.
Desde diciembre de 2024, el Índice de Salarios acumuló un aumento del 17,2%, por encima del incremento del 13,3% en la inflación en ese período. Desde mayo de 2024, los salarios en promedio han subido un 65,7%, mientras que la inflación en ese lapso fue del 43,5%. Aunque esto representa una leve recuperación del salario real, no se equipara completamente con el poder adquisitivo perdido en 2024.
Salarios privados y públicos
Los datos del INDEC también revelan que los salarios del sector privado registrado no lograron la mejora real en el poder adquisitivo que indica el promedio general. A pesar de un incremento del 2% en mayo, en los primeros cinco meses del año acumularon solo un 11,8% de aumento, quedando 1,5% por detrás de la inflación para el mismo período.
En contraste, el sector público tuvo una mejora intermensual del 3,3% en mayo, superando el IPC acumulado hasta ese mes con un aumento del 15%. El índice de salarios del sector privado no registrado o informal fue el que más impulsó el promedio general, con un aumento del 40% en los primeros cinco meses del año y del 5,6% en mayo.
Cambios en el empleo
A pesar de los esfuerzos del Gobierno por impulsar la generación de puestos de trabajo registrados, los datos oficiales muestran que el 40% de los asalariados en el sector privado no están registrados por sus empleadores. Además, el 14% de los empleados que trabajan en negro facturan como monotributistas, legalizando así el vínculo como prestación de servicios.
La informalidad laboral es más común en microempresas de menos de 10 empleados, pero la modalidad de colaboradores externos que facturan como monotributistas prevalece en las empresas más grandes. A pesar de las medidas propuestas para combatir la informalidad laboral, aún no se refleja un impacto relevante en el incremento del empleo formal, mientras que los salarios del sector no registrado se recuperan más rápidamente.
En resumen, los datos del Índice de Salarios de mayo de 2025 muestran una recuperación en el poder adquisitivo real de los trabajadores, aunque existen disparidades entre los sectores privado y público. La informalidad laboral sigue siendo un desafío importante en el mercado laboral argentino, y las medidas para fomentar el empleo formal aún no han tenido un impacto significativo.